
Alrededor de la mesa de juntas, diez niños de entre 8 y 12 años escuchan atentos el proyecto que cada uno de ellos presenta. Todos son activistas destacados, a pesar de su corta edad, que luchan por un agua limpia, una vivienda digna o para que otros niños aprendan a leer.
La escena parece propia de un «talent-show»: un jurado de cuatro expertos valora a los diez jóvenes, todos nacidos al frío de la crisis financiera de 2008, para saber cuál de los jóvenes «emprendedores sociales» se llevará un bonus de 5.000 dólares para sus proyectos comunitarios.
Fuente: Agencia EFE