José Cortazar Navarrete.- Mérida, Yuc. 11 de julio. – La sobre utilización de los equipos y materiales vinculados a la “ciber-manía” ha dado lugar a la aparición de nuevos padecimientos, primordialmente a personas jóvenes que utilizan de manera exagerada el teléfono, los video juegos, las plataformas personalizadas de imagen y otros productos que aparecen a través del ciber espacio.
Psicólogos, médicos y trabajadores sociales advierten nuevos problemas en la salud mental de decenas de jovencitos que ‘se conectan’ en sobre horarios a las redes sociales, plataformas de información o tratar de descubrir nuevos mecanismos y herramientas para obtener información que muchas veces no tiene utilidad. Según datos del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi) en promedio el mexicano se conecta durante 3 horas al día al internet.
Sin embargo, las personas más jóvenes, con edades de entre 12 y 29 años superan las 8 horas diarias de vinculación al internet, generando una codependencia de la información y sobre uso de las denominadas redes sociales donde se intercomunican con amigos, vecinos y familiares.
Es por ello que, se están presentando modificaciones al comportamiento y la generalización de aspectos de vida que muchas veces no pertenecen a la identidad de una región, uso y costumbres que por moda se incluyen, se exigen y se adoptan para transformar la visión, el entendimiento y la naturaleza de un adolescente o adulto joven.
Padecimientos como: la whatsappitis, la selfifobia, la wikipedistis y la tiktoktitis, son patologías que ya estudian los especialistas de la salud mental y también médicos y especialistas en ortopedia. En los últimos dos años en Mérida se han reportado 6 casos de whatsappitis, una especie de inflamación o hinchazón en los dedos pulgar y anular, anular y meñique por el uso excesivo del celular.
Este padecimiento se advierte de manera importante en adolescentes, quienes se extralimitan en el teclado y video juegos, con tiempos extremos de operación frente a una pantalla.
Sobre este tema, el ortopedista Manuel Conde Serrano señaló que, en casos extremos, una persona puede deformar los dedos de la mano para la utilización de un equipo celular, pero que, debido a la presión y consistencia del uso de un teléfono, es posible que se presente una inflamación, ocasionando dolor en las articulaciones y nervios por el ejercicio extremo en los mini teclados de las pantallas.
A su vez, el psicólogo Russel Medina enfatizó que, los problemas de salud mental entre jóvenes se agudizan debido a la aceptación o falta de aceptación de sus problemas en el uso del celular. Estamos evaluando a una persona, dijo por un extraño caso de celfifobia, este problema se advierte con las personas que tienen miedo a hacerse una fotografía y no ser fotogénico, lo que ocasiona un problema emocional en su autoestima.
De la misma forma, hoy escuchamos la selfimanía, esto es, la sobre exigencia de usar el teléfono para hacer fotografías para las redes sociales que muchas veces superan las 50 o 60 imágenes al día, exigiendo una sobre representación de la imagen de un adolescente o proponiendo un abuso en la personificación, llevando al extremo una idea creativa de una situación que supera los límites de una presencia ante el público -su publico o seguidores- , añadió.
Otros problemas ya analizados son para personas denominadas “cinéticos”, que son aquellos que sobre demandan información de salud para aplicar y dar consejos a través de redes -influenciantes- sin tener conocimientos ciertos, científicos, reales del uso o condición de un producto y que puede ocasionar daños a otras personas.
Así mismo han aparecido los “wikipedistas” o “goglistas” personas que exigen una sobre demanda en el uso de redes de información para todo tipo de actividades, sin establecer fuente informativa, origen de la información o aspectos que contradigan la información solicitada, abundó. (Imágenes de Internet)