

José Cortazar Navarrete.- Mérida, Yuc. 2 de mayo.- En poco más de cinco años, la capacidad de las guarderías subrogadas del Instituto Mexicano del Seguro Social han dejado de recibir a unos 12 mil niños yucatecos por falta de pagos y reorientación del gasto del organismo paraestatal. El Grupo Nacional de Trabajo que aglutina a 13 de las 24 guarderías subrogadas del IMSS en Yucatán informó que entre 6 o 7 parvularios están a punto de cerrar por falta de retabulación de los recursos que debe cubrir el organismo de seguridad social federal.
Elías Dájer Fadel responsable de este Grupo de Trabajo dio a conocer que, desde 2018 el gobierno federal no cubre los aumentos equitativos a la atención de los niños que son atendidos en las guarderías privadas con subgrogación federal por lo que han formado una asociación nacional para dialogar con la paraestatal. Explicó que, han solicitado al director general del IMSS Zoé Robledo la recomposición del pago correspondiente por la atención de cerca de 4 mil niños yucatecos, sin obtener respuesta.
Detalló que, en Mérida y Umán funcionan 24 guarderías subrogadas -no hay este servicio en otros municipios- que atienden a unos 4 mil menores de entre uno y cuatro años con servicio subrogado del IMSS. Señaló que, desde 2018 la cobertura por este servicio no se ha actualizado, lo que representa un alto impacto en el cuidado y la calidad, seguridad y calidez que reciben los hijos de trabajadores derechohabientes.
Dijo que, actualmente en promedio un niño atendido en una guardería representa un costo de 9 mil 80 pesos mensuales y que el IMSS está cubriendo únicamente 5 mil 500 pesos. Expuso que, en los últimos cinco años, los costos operativos y requerimientos de estos centros de atención a primera infancia se incrementaron 121 por ciento, debido a los aumentos salariales aplicados en el bienio y que el IMSS no reconoce.
Añadió que, unas 500 guarderías en todo el país están demandando al organismo federal la reformulación del pago de servicios y con ello, atender la demanda creciente de espacios en las guarderías. Sostuvo que, en 2016 el IMSS dedicaba 24 mil millones de pesos al pago de la subrogación de servicios y actualemente eroga 23 mil 800 millones, con un sobre ejercicio fiscal de cerca de 15 mil millones que no ejerce en este rubro.
Expuso que, el pago de la subrogación de guardería es un recurso que pagan las empresas de manera directa, utilizando el 1 por ciento de sus ingresos, sin costo para el trabajador y cuyo monto está etiquetado para el pago de servicios. Sin embargo, en los últimos cinco años, el IMSS ha reducido la cobertura y muchas guarderías han dejado de concursar por la subrogación ante el costo que ocasiona la falta de un servicio equilibrado.
Dájer Fadel puntualizó que, todas las guarderías están certificadas con las normas exigidas por el IMSS y están sujetas a una serie de mecanismos de control, supervisión, con acciones y compromisos de protección, seguridad y vigilancia en atención de los menores inscritos en estos centros de primera enseñanza.
Recalcó que, en este momento, únicamente se atiende al 9 por ciento de los niños yucatecos de padres derechohabientes en dichas guarderías, cuando que, en 2018 se atendía a un 23 por ciento, con la posibilidad de que desaparezca este servicio ante la falta de respuesta de la paraestatal.
Sostuvo que este problema impacta a unas mil 190 guarderías en el país, 24 de ellas en Yucatán y enfatizó que, con el crecimiento poblacional en el estado, la exigencia y demanda de espacios en las guarderías se ha incrementado de manera muy alta tanto en Mérida, como en municipios como Valladolid, Progreso, Izamal, Kanasín y Hunucmá, donde se han instalado parques industriales con las fábricas y factorías, que “han llegado” con la relocalización de empresas, aseveró.
Insistió en señalar que, el IMSS no toma en cuenta el impacto inflacionario en productos y servicios, los costos diferidos que debe de cubrir la guardería, además de los aumentos salariales que en cinco años se han elevado en cerca de un 50 por ciento, lo que ha ocasionado un daño a las guarderías con servicios subrogados.
Agregó que, la falta de la nivelación del pago de subrogación, pone en riesgo el empleo de cientos de trabajadores que se desempeñan en estos centros educativos y de cuidados, ya que, en promedio, cada guardería contrata entre 20 y 25 personas para cubrir todas las necesidades de protección, seguridad, educación y alimentación que reciben los menores.