José Cortazar Navarrete- Mérida, Yuc- En Mérida habitan unas 37 mil 600 personas registradas con alguna discapacidad, de este universo, el 30 por ciento ha logrado obtener una fuente de empleo con seguridad social. Se estima que cerca de 26 mil ciudadanos con algún tipo de discapacidad no tienen opción laboral.
Sobre este tema, Jesús Campos Hernández, presidente de la Asociación Ciudadanos con Oportunidades, señaló que son necesarias mayores políticas públicas y mecanismos para la inclusión de este sector social a las tareas socio económicas del estado.
Campos Hernández, abogado, con discapacidad motriz, expresó que, urgente la sensibilización de la sociedad para apoyar a las personas con discapacidad. En nuestra ciudad, explicó, Mérida, viven más de 37 mil personas con alguna discapacidad, de este universo, solo el 30 por ciento tiene un puesto de trabajo con seguridad social.
Se necesita mayores oportunidades de movilidad, capacitación, educación y acciones transversales de políticas públicas para apoyar e incluir a un mayor número de personas a tareas laborales. Dijo que, de las 37 mil 600 personas registradas en nuestra ciudad, con alguna discapacidad, 22 mil son por discapacidad motriz.
Es importante, explicó, una mayor vinculación del sector empresarial con las personas con discapacidades para fomentar el empleo, pero también el autoempleo y el emprendimiento, ya que muchas de estas personas requieren de un impulso que les permita salir adelante, tener una posibilidad económica e integrarse a las tareas económicas de la ciudad.
Sobre este tema, Michel Salum Francis, presidente de la Cámara de Comercio de Mérida, destacó que hace falta una mayor conciencia de la Iniciativa Privada para respaldar este esfuerzo, ya que, son personas que pueden aportar no solo mano de obra, sino capacidades mucho más importantes.
Se necesitan políticas públicas también, enfatizó porque las autoridades estatales deben también aportar, se necesita un transporte público que permita a las personas con capacidades diferentes poder desplazarse, espacios y recintos específicos para puedan ser independientes, teniendo las condiciones para acudir a un centro de trabajo y cumplir con sus horarios y mecanismos de responsabilidad laboral, explicó.
Ciertamente, hay decenas de personas que nos hacen estas observaciones sobre la inclusión y es preciso trabajar mucho más de la mano en las tareas y necesidades de este sector que requiere de alternativas para su participación en las actividades económicas.
Hay suficientes ejemplos, expuso, tenemos siempre colaboradores y amigos que han demostrado que son capaces de superar adversidades, para llegar a cumplir con sus metas de estudio, para emprender y obtener un espacio laboral.
De ahí la necesidad de que más personas, con capacidades diferentes, se incluyan a las tareas productivas, tanto estudiando y capacitándose para obtener una certificación o un grado de estudio o bien para poder responder a propuesta de autoempleo y emprendimiento para crear una empresa que les permita salir adelante.
Hace falta que la sociedad en su conjunto se una a este tipo de acciones y más personas con discapacidad puedan participar en las actividades económicas, ya que, la falta de alguna de sus funciones motoras, visuales o auditivas no les impide poder ser altamente creativos y responsables en sus actividades y necesidades de vida, estableció.