José Cortazar Navarrete- Mérida, Yuc.- Es notoria la incertidumbre de parte de los empresarios para invertir y ese es problema que ha ocasionado cifras récord de desempleo en el mes de mayo pasado. Yucatán ha tenido suerte, no ha resentido esta baja laboral, pero es probable que nos alcance, sostuvo el presidente de la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), Yucatán, José Alberto Abraham Xacur.
A diferencia de otros estados donde la industria de la construcción ha caído entre un 50 y hasta un 80 por ciento, en Yucatán se contrajo 1.8 por ciento. Pero es notorio que puede alcanzarnos y será un verdadero problema, expresó.
Según datos confirmados, el gobierno federal tiene un subejercicio fiscal muy alto, esta falta de inversión por parte del gobierno está ocasionando un grave problema de destrucción de empleo y falta de confianza de la Iniciativa Privada para concretar inversiones, recalcó.
Es indiscutible que a nivel nacional se refleja ya una caída en la inversión y eso repercute de manera directa en la creación de empleos. En el caso de Yucatán estamos en una excepción, pero es fundamentalmente porque la inversión se mantiene, sin embargo, esta falta de inversión pública, también frena la actividad empresarial, señaló.
Hay el riesgo que esta desaceleración nos alcance también a nosotros, apuntó el líder empresarial, hemos escuchado los problemas que Yucatán tiene en el rubro de energía, que frena también la competitividad, si no se solucionan rápidamente estos problemas, muchas inversiones se irán, repuso.
Las empresas que están viniendo están frenando por falta de esta capacidad de instalación de empresas y fuentes de empleo. Tenemos casos de empresas que demandan una capacidad de energía y que en este momento no se surte, frena las condiciones de inversiones, de empleo, de productividad, pero también de certidumbre para las inversiones, dijo.
Tenemos otros casos, las empresas generadoras de energía alternativa que están encontrando condiciones adversas con ecologistas y personas que se sienten con la condición de parar a una empresa que ya tiene sus permisos para funcionar. Las empresas están encontrando muchos problemas por amparos y consultas ambientales que ponen trabas a estas empresas.
Se han dado diálogos, hay negociaciones, pero no se respeta la ley, porque si una empresa ya completó sus permisos, entonces debe funcionar y no deben de crearse barreras, porque establece una falta de certidumbre jurídica y obliga a que las empresas puedan cambiar sus proyectos y cerrarse las inversiones, recalcó.
Resulta que, se aprueban los proyectos, se concretan los permisos y viene alguien que establece que no fue escuchado y para una obra o un proyecto con un amparo y entonces detiene un proceso productivo y pone en tela de juicio la certidumbre a las inversiones, agregó.
Hay que respetar la ley, recalcó y si las empresas ya cumplieron con los requerimientos y necesidades que se les exige deben de trabajar, abrir fuentes de empleo y generar productividad, abundó.
Crear más incertidumbre, establecer más barreras a las inversiones obligará a que esta ola de desempleo que se está presentado en el país afecte a nuestro estado y eso, complicará aun más las cosas para Yucatán, concluyó.