José Cortazar Navarrete. – Mérida, Yuc. 6 de enero. – El Instituto Nacional de Antropología e Historia buscará destrabar el conflicto en la zona arqueológica de Chichen Itzá y sostendrá reuniones por separado con los representantes de las comunidades afectadas. Arturo Chab Cárdenas, director del Centro INAH-Yucatán señaló que no se ha presentado ninguna denuncia oficial contra el director de la zona arqueológica, por lo que continuará realizando sus funciones en el sitio.
Chab Cárdenas ofreció una rueda de prensa para detallar los proyectos que se están desarrollando en la zona arqueológica, que cumple su segundo día sin turistas debido al cierre de la carretera federal 180 por un grupo de manifestantes que bloquea el acceso vial al sitio arqueológico más visitado del país.
El director del Centro INAH-Yucatán aseveró que, quienes se opongan a los proyectos que construye el gobierno federal, están contra el gobierno y que la institución mantiene las condiciones de dialogo recibiendo las propuestas los pobladores de las cuatro comunidades afectadas y hasta el momento no se ha presentado ninguna denuncia formal-oficial contra ningún funcionario de la institución.
Explicó que, un grupo de inconformes han emitido una serie de declaraciones mediáticas donde exigen una serie de condiciones que no tienen fundamento y con ello, intentan controlar el acceso a este recinto, los cobros a los ambulantes y exigencias sobre el personal que trabaja en ese espacio cultural Patrimonio de la Humanidad.
Recalcó que, a partir de este sábado 7 de enero realizarán reuniones por separado con los pobladores de las comunidades afectadas para recibir peticiones y propuestas para atender, principalmente desde la instancia federal. Destacó que, el problema es estrictamente federal, con el bloqueo de la carretera 180 -Mérida-Puerto Juárez- en el tramo Pisté- Valladolid.
Argumentó que, en todo momento el INAH mantiene el control de la zona arqueológica, donde está el parador turístico estatal, bodegas, áreas operativas y de investigación del sitio arqueológico y para ello desplegó a un grupo de 50 agentes federales que custodian las entradas.
Declaró que, se buscará dialogar con los pobladores de las comunidades de Xcalacoop, Nuevo San Felipe y dos comunidades más, que han señalado inconformidades sobre aspectos del desarrollo integral del proyecto que incluirá un museo del sitio, el centro de atención a visitantes y un espacio para la ubicación de los ambulantes que están instalados en la zona arqueológica y que tendrá una inversión de 2 mil 100 millones de pesos.
Chab Cárdenas desestimó las acusaciones y presuntos actos de corrupción que se han emitido en contra del director del sitio arqueológico Marco Antonio Santos y en forma detallada manifestó que los señalamientos han sido mediáticos y hasta el momento no se ha presentado ninguna queja o denuncia formal contra el funcionario.
Aseveró que, el cierre de la vía federal impide el tránsito a 150 trabajadores que se desempeñan en el sitio arqueológico en investigación y mantenimiento, además de cerca de 6 a 7 mil turistas que visitan diariamente la milenaria urbe maya y está causando pérdidas cuantiosas a los prestadores de servicios y a las comunidades de la zona que reciben recursos de esa derrama turística.
Mencionó que, el bloqueo de la vía federal impide el tránsito de vehículos y materiales al área donde se está construyendo el nuevo museo y el centro de visitas, lo que establece una clara oposición al proyecto del gobierno federal, por ello, señaló la necesidad de establecer el dialogo con los inconformes y con ello levantar el bloqueo y recuperar las operaciones de las obras que se están realizando.
Chab Cárdenas también habló sobre las condiciones legales de los terrenos donde se ubica el sitio arqueológico. Subrayó que, el polígono que comprende la zona arqueológica es de mil 500 hectáreas y que los terrenos donde se construirá el museo y el centro de atención a visitantes son terrenos federales, por lo que, el gobierno no interviene en otras áreas.
Abundó que, buscarán un nuevo acercamiento con el grupo de inconformes y tratar de llegar a un acuerdo. En su caso, dijo, hay peticiones de las comunidades sobre construcción de áreas deportivas, carreteras, escuelas y otras necesidades que deberán ser desarrolladas por otras áreas gubernamentales, pero se buscará que se cumplan esos compromisos y las poblaciones obtengan las demandas que solicitan, comentó.
Descubre más desde NotaTrasNota
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.