
Eduardo May.- Mérida, Yuc. 31 de marzo.- En tanto que Yucatán crecerá 2.1 por ciento en 2025, el país apenas rebasará el 0,6 por ciento, primordialmente presionado por los cambios turbulentos de la economía de Estados Unidos y la imposición de aranceles del 25 por ciento a productos nacionales no establecidos en el TMEC. Las variables actuales y la presión por los aranceles podría frenar de manera bruzca el crecimiento del estado.
Al cierre del primer trimestre del año, la incertidumbre por la imposición de aranceles y dupling mexicano que continúa enviado productos chinos a Estados Unidos, resultaría en una situación complicada a las empresas locales, ocasionando cierres y notables bajas en su plantilla laboral.
El reflejo de los problemas económicos aplicarían a las cadenas productivas que respaldan a los grandes corporativos que se han instalado en Yucatán y que generan miles de empleos directos para jóvenes profesionistas y técnicos.
Aunado a este problema, Yucatán enfrenta tasas inflacionarias por encima de la media nacional, provocando una mayor presión a los asalariados menores, provocando una pérdida importante en el poder adquisitivo de los trabajadores, pero también, una posible pérdida de empleos debido a la incertidumbre de la percepción económica.
Los reportes del Inegi sobre aspectos inflacionarios en el tercer trimestre del año advierten una recesion técnica en el país, condición que, a corto plazo afectará a Yucatán, debido a la baja productiva de las empresas exportadoras, ocasionando a la vez, una baja importante en el consumo de productos básicos, debido a los constantes incrementos de precios,
En tanto que, el gobierno reducirá la inversión en infraestructura y los recortes a los estados, ocasionará un estancamiento entre los sectores económicos que soportan la economía, uno de ellos, la industria de la transformación, que actualmente genera poco más de 28 mil fuentes de trabajo directo.
Si bien, los anuncios de obras como el Puerto de Altura, obra que se ha demorado por casi 20 años, el sector inmobiliario está rindiendo frutos creciendo 12 por ciento anual.
Sin embargo, la inflación persiste como un desafío, con una tasa del 5.15 por ciento en 2024, superando la media nacional del 4.4, los yucatecos enfrentan un encarecimiento de productos y servicios. Este incremento afecta principalmente a las familias de ingresos medios y bajos, complicando el acceso a la vivienda.
A pesar del panorama inflacionario, el mercado laboral muestra signos positivos. La diversificación económica ha generado empleos formales en sectores clave como el turismo, la tecnología y los servicios empresariales. Además, las empresas continúan invirtiendo en capacitación para fortalecer la competitividad de la fuerza laboral local.
Expertos señalan que para mantener el crecimiento y contrarrestar la inflación, es necesario diversificar aún más la economía y fomentar la inversión responsable. La colaboración entre el sector público y privado será fundamental para garantizar la estabilidad y mejorar el bienestar de la población.