
Desde su llegada a la presidencia de Estados Unidos, Trump ha reiterado sus intenciones de destituir al presidente de la Fed, ¿pero realmente puede hacerlo?

El presidente Donald Trump ha vuelto a criticar al jefe de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell, por no bajar las tasas de interés y ha reiterado su amenaza de despedirlo. A pesar de que el mandato de Powell finaliza en 2026, los constantes ataques de Trump ponen en duda su futuro en la institución.
Powell se ha negado a ser influenciado políticamente y ha afirmado que las decisiones de la Fed se basarán en lo mejor para los estadounidenses. Sin embargo, Trump insiste en que Powell debería seguir el ejemplo del Banco Central Europeo y bajar las tasas.
La legalidad de despedir al presidente de la Fed es compleja y nunca ha sido probada, ya que ningún mandatario ha destituido a un presidente de la Reserva Federal en la historia de Estados Unidos. Según la revista Time, la ley permite el despido con «causa justificada», pero históricamente se ha interpretado como mala conducta o incapacidad, no como desacuerdos políticos.
Sarah Binder, experta en la Reserva Federal, considera que si Trump intenta despedir a Powell, aumentará la incertidumbre en los mercados. Mientras tanto, la administración Trump está preparando el terreno para una posible confrontación, ya que el secretario del Tesoro, Scott Bessent, ha declarado que espera entrevistar a posibles sustitutos de Powell en otoño.
La Corte Suprema de Estados Unidos está considerando un caso sobre la facultad del presidente para despedir a altos funcionarios de agencias independientes, lo que podría poner a prueba un precedente legal de 1935 que limita la facultad del presidente para destituir a estos funcionarios. Powell fue nominado inicialmente por Trump en 2017 y fue nombrado para un nuevo mandato de cuatro años por el expresidente demócrata Joe Biden en 2022. Powell ha dejado claro que no renunciaría si Trump se lo pidiera y ha dicho que su despido sin causa justificada iría en contra de la ley.