
Eduardo May.- Mérida, Yuc. 19 de abril. – El mercado interno de productos básicos bajó un 2,5 por ciento en el tercer mes del año, acumulando 19 meses de pérdida en el poder adquisitivo de los trabajadores. La inflación-carestía, está presionando el bolsillo de los trabajadores que menos ganan, lo que aplica en tener menos productos en la mesa.
El Indicador Oportuno del Consumo Privado (IOCP) que emite el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) presentó cifras significaticas en el desempeño del consumo al tercer mes de año, reportando una caída trimestral del 0,3 por ciento debido a la inflación-carestía, presiones en el mercado de productos, pero también ante la recesión técnica que atraviesa el país.
El IOCP indicó que, el consumo privado del mercado interno del país decreció a una tasa de 0.1 por ciento mensual en marzo, su tercera caída en los últimos cuatro meses, de acuerdo con el referente económico. Así mismo, el consumo privado reportó una disminución de 2,5 puntos en marzo frente al tercer mes de 2024, su cuarta baja consecutiva y las más acentuada en 49 meses o desde febrero de 2021.
Las cifras del indicador económico advierte una fuerte presión sobre salarios y empleo, debido a la condición de una caída laboral importante. El Inegi reportó previamente que, en febrero pasado el país perdió unas 257 mil plazas laborales y esto se refleja en las condiciones del desequilibrio de las exportaciones de empresas manufactureras exportadoras.
En su caso, en Yucatán, la inflación golpea primordialmente a las familias con menores ingresos, debido al elevado costo de los productos básicos, el encarecimiento de insumos prioritarios como cárnicos, lácteos, frutas, verduras, además de incrementos a costos fijos como electricidad, combustible y servicios.
El IOCP detalló en su reporte que, las falta de medidas en políticas públicas para garantizar el equilibrio de precios y la incerdidumbre por políticas públicas externas está obligando a una serie de medidas reductivas, debido a la posible pérdida de empleos, inseguridad y los costos de los servicios que se incrementa día con día.
El consumo privado es un monitoreo económico que valora cuánto están gastando las familias locales en su vida diaria, e incluye desde lo que se compra en el supermercado, hasta servicios como el pago de interne y el reflejo se complementa con los reportes que emiten las empresas comerciales en sus adquisiciones.
En este sentido, esta misma semana el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) presentó su reporte mensual con datos económicos del país y una valoración de la situación del estado de Yucatán. Las cifras actuales de crecimiento del país se han contraído de manera importante y en el último trimestre del año un rango mayor hasta establecer una recesión técnica, informaron los especialistas.
Uno de los focos de alerta está en el empleo, reportan los números, si bien se había proyectado la creación de 280 mil nuevas plazas laborales al inicio del año, al cierre del primer trimestre esa cifra bajó a 220 mil, lo que indica un menor dinamismo del mercado laboral. Esta condición afecta especialmente a los jóvenes que se integran cada año a la población económicamente activa, sostine el reporte del IMEF.
En el caso de Yucatán, se observa una desaceleración en la generación de empleos. De cada cien vacantes previstas, solo se estarían ofertando 95. Ante este panorama, el IMEF exhortó a los trabajadores a mejorar su productividad y a las empresas a apostar por la innovación como vía para enfrentar la contracción económica.