
El nuevo memorando firmado por Trump prohíbe el turismo estadounidense a Cuba, en un giro que revierte la política anterior y refuerza las restricciones económicas contra la isla
Washington.-El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este lunes un memorando presidencial que endurece la política estadounidense hacia Cuba y revierte la línea adoptada anteriormente por la administración de Joe Biden.
La información fue confirmada por Reuters, citando a un funcionario de la Casa Blanca que habló bajo condición de anonimato.
El nuevo memorando prohíbe el turismo de ciudadanos estadounidenses a la isla y refuerza el embargo económico existente, reafirmando así las restricciones sobre transacciones con Cuba
Según la fuente citada por la agencia, la decisión busca alinear la política exterior estadounidense con una postura más firme hacia el régimen cubano, en contraste con el enfoque más flexible promovido durante el gobierno de Biden.
El memorando, publicado en el sitio web de la Casa Blanca, restablece la prohibición total del turismo estadounidense a Cuba, una de las piezas centrales del enfoque restrictivo adoptado por Trump.
Esta prohibición no solo impide los viajes turísticos directos, sino que además establece mecanismos de cumplimiento que obligan a las personas y entidades involucradas en viajes autorizados a conservar registros detallados de todas las transacciones vinculadas durante un período mínimo de cinco años, y someterse a auditorías regulares para verificar el cumplimiento de las disposiciones vigentes
Asimismo, el documento reitera el respaldo oficial al embargo económico y manifiesta la oposición firme del gobierno estadounidense a cualquier intento, ya sea en Naciones Unidas u otros foros internacionales, de exigir su levantamiento.
La administración Trump defiende que el embargo sigue siendo una herramienta legítima de presión política y económica para exigir cambios estructurales en el régimen cubano.
El texto también subraya la importancia de apoyar al pueblo cubano a través del fomento de un sector privado independiente, la promoción de la libertad de asociación, el acceso a internet sin restricciones, la libertad de prensa y el fortalecimiento de los vínculos con la sociedad civil.
En este sentido, el memorando busca garantizar que cualquier interacción entre ambos países esté diseñada para empoderar a los ciudadanos cubanos y no a las instituciones represivas del Estado.
Finalmente, se ordena la elaboración de informes periódicos sobre violaciones de derechos humanos en la isla, incluyendo detenciones arbitrarias, condiciones inhumanas de los presos políticos, acoso a disidentes y represión a comunidades religiosas y organizaciones de la sociedad civil.
También exige una evaluación oficial sobre el estatus de fugitivos estadounidenses protegidos por el régimen cubano, considerados por Washington como un obstáculo persistente para la cooperación bilateral en materia judicial y de seguridad.